Los chicos ya tienen su ley

Diputados sancionó la ley que deroga la tan cuestionada Ley de Patronato. No podrá haber niños y adolescentes institucionalizados por razones sociales que tengan que ver con la falta de recursos económicos de las familias.
Luego de tantos años de idas y venidas legislativas, y con poco más de un siglo de permanencia, fue derogada la Ley de Patronato de la Infancia. En su lugar se pone en vigencia la Ley de Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes, a entender de quiénes estamos en el tema, de absoluta vanguardia.
Esta ley respeta al niño como "sujeto" de derecho y no como "objeto" de derecho.
La anterior otorgaba atribuciones ilimitadas a la justicia de menores quien disponía la institucionalización de los niños y jóvenes aún por causa de pobreza.
Esta nueva ley, al permitirles a los jueces de menores únicamente ocuparse de los casos en dónde hay cuestiones penales, pone en marcha todo un aparato asistencial, llevado adelante en cooperación con los municipios, quienes serán los encargados de poner en marcha todos los recursos necesarios para asistir al chico dentro de su familia. La ley expresamente dice que “…los organismos de políticas públicas y de protección de los derechos del Niño serán los encargados de resolver las cuestiones sociales…”
De esta manera estamos en condiciones de decir que estamos frente a un avance histórico que abre nuevas perspectivas para los más de 10.000 niños, en todo el país, internados bajo el viejo sistema.
En los casos de violencia familiar extrema y donde no se encuentre ni familia extensa ni adoptiva, los niños deben ser albergados en los denominados “Hogares Convivenciales de puertas abiertas”, tal como lo viene haceindo históricamente nuestra Fundación en grupos de no más de 30 niños y en unidades de vivienda distintas.
Esta nueva ley, a decir del Sr. Jorge Pizarro, titular de Unicef Argentina, “beneficia al 35 por ciento de la población, es decir a todos los menores de 18 años que hoy están expuestos a la aplicación de la Ley de Patronato saldando una deuda de 15 años que tenía el Parlamento y corona con éxito el esfuerzo de muchas organizaciones de la sociedad civil”